Test urinario de 18 genes mejora significativamente la detección de cáncer de próstata de alto grado
Fecha
4 ene 2025
Resumen
Un equipo liderado por el Dr. Jeffrey J. Tosoian del Departamento de Urología de la universidad Vanderbilt Medical Center, Nashville, Tennessee, USA desarrolló y validó un test urinario de 18 genes que demuestra ser más preciso para detectar cáncer de próstata de alto grado, reduciendo biopsias innecesarias hasta en un 51% en cohortes validadas.
El cáncer de próstata es el tumor maligno más diagnosticado en hombres y una de las principales causas de mortalidad por cáncer. Aunque el antígeno prostático específico (PSA) ha sido la herramienta principal para tamizaje, su baja especificidad para identificar cánceres agresivos (GG2 o mayor) ha resultado en una alta tasa de sobrediagnósticos y procedimientos invasivos innecesarios. El estudio del Dr. Tosoian y colegas buscó superar estas limitaciones mediante el desarrollo de un panel de biomarcadores basado en genes específicamente expresados en tumores de alto grado, mejorando la precisión diagnóstica y optimizando la toma de decisiones clínicas.
Metodología y diseño:
Se realizó un análisis de secuenciación de RNA en 58.724 genes, identificando 17 marcadores únicos sobreexpresados en tumores de alto grado. Estos genes se combinaron con otros previamente validados, como PCA3 y TMPRSS2:ERG, para conformar un panel de 18 genes utilizado en el test MyProstateScore 2.0 (MPS2). Se diseñaron dos modelos predictivos: uno sin considerar el volumen prostático (MPS2) y otro que lo incluye (MPS2+), para ajustar el rendimiento según la disponibilidad clínica de esta medida.
El estudio incluyó una cohorte de desarrollo con 761 pacientes y una cohorte de validación externa con 743 pacientes, todos con niveles elevados de PSA (3-10 ng/mL) y biopsias realizadas entre 2008 y 2020. Los datos fueron analizados mediante modelos de regresión logística calibrados, asegurando una sensibilidad del 95% para detectar cánceres de alto grado (GG2 o mayor). El rendimiento del test fue comparado con herramientas actuales como PSA, PHI y modelos de biomarcadores más simples.
Resultados detallados:
El modelo MPS2 mostró una superioridad significativa en precisión diagnóstica, alcanzando un área bajo la curva (AUC) de 0.81, frente al 0.60 de PSA y al 0.77 del índice de salud prostática (PHI). Cuando se consideró el volumen prostático en el modelo MPS2+, el AUC aumentó a 0.82, lo que lo posiciona como la herramienta más precisa para identificar cánceres agresivos. Además, el test redujo las biopsias innecesarias en un 35% en pacientes sometidos a su primera biopsia y en un 42% cuando se utilizó MPS2+. En pacientes con biopsias repetidas, la reducción fue aún mayor, alcanzando un 46% con MPS2 y un 51% con MPS2+.
El test también demostró un excelente valor predictivo negativo (VPN), con cifras entre 95% y 99% para cánceres de GG2 o mayor, y del 99% para tumores GG3, lo que asegura una detección precisa de las formas más agresivas de la enfermedad. Dentro de los marcadores moleculares identificados, genes como APOC1, B3GNT6, NKAIN1 y SCHLAP1 destacaron por su alta especificidad para tumores de alto grado, mientras que PCA3 y TMPRSS2:ERG complementaron el panel para una mayor sensibilidad diagnóstica.
Impacto clínico:
El test urinario MPS2 representa un avance significativo al proporcionar una herramienta no invasiva y práctica para el tamizaje primario de cáncer de próstata. Su capacidad para evitar biopsias innecesarias reduce los riesgos y costos asociados a procedimientos invasivos, a la vez que mantiene una alta sensibilidad para detectar tumores agresivos. Para los especialistas, este test permite identificar tumores ocultos y tomar decisiones clínicas más informadas, mejorando la atención personalizada.
Se puede decir que el test MPS2 redefine el estándar en la detección del cáncer de próstata de alto grado.