Predicción de la pérdida de gusto en radioterapia para cabeza y cuello

La pérdida o alteración del gusto es una de las toxicidades más comunes en pacientes con cáncer de cabeza y cuello sometidos a radioterapia. Entre un 57% y un 94% de los pacientes sufren esta toxicidad durante el tratamiento, y hasta un 61% la sigue teniendo a largo plazo. 

Este estudio propuso una aproximación más anatómica y específica: utilizar la mucosa lingual con papilas gustativas como nuevo órgano de riesgo, puesto que podría mejorar la precisión de la predicción de la pérdida de gusto. La región estudiada incluye la capa superior de la lengua donde se concentran las papilas. 

🧪 ¿Qué hicieron?

Analizaron una cohorte principal de 691 pacientes tratados con radioterapia curativa entre 2007 y 2022, comparando las dosis medias entre la cavidad oral y la mucosa lingual. 

Los pacientes respondieron un cuestionario (EORTC QLQ-H&N35) en fase aguda, a 6 y a 12 meses para determinar la pérdida de gusto. 

Utilizaron modelos de probabilidad de complicaciones de tejidos normales (NTPC), que describen la relación dosis-respuesta y se utilizan clínicamente para optimizar los planes de tratamiento y reducir los riesgos de toxicidad individual. También analizaron la segmentación manualmente.

🔎 ¿Qué encontraron?

Los resultados del estudio mostraron que:

• Hay una buena concordancia entre la segmentación manual y la automática de la mucosa lingual con papilas gustativas, tanto en términos de dosis media como de volumen. No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre ambas técnicas, lo que valida el uso de la herramienta de auto-segmentación en estudios de gran escala.

• La dosis media recibida por la mucosa lingual presentó una capacidad predictiva similar a la de la cavidad oral completa cuando se evaluó de forma univariable. Pero al incorporar esta estructura en modelos NTCP para predecir la pérdida de gusto, el modelo que usaba la mucosa lingual no superó al modelo de referencia que utilizaba la cavidad oral en ninguno de los tiempos evaluados. 

En conclusión…

• Los resultados se mantuvieron consistentes en todos los puntos temporales evaluados.

• La introducción de la mucosa lingual como órgano de riesgo no aportó una mejora significativa en la capacidad de predicción del modelo de toxicidad gustativa.

Así pues, se concluye que ambas estructuras anatómicas (cavidad oral y mucosa lingual) contienen información predictiva equivalente respecto a esta toxicidad.